Hemos tomado la difícil decisión de cerrar nuestro programa de servicios de atención domiciliaria, con efecto a partir del 31 de octubre de 2020, tras 25 años de proporcionar a las personas mayores y a los adultos con discapacidad atención personalizada a domicilio. La decisión no ha sido fácil, pero ha sido necesaria debido a varios factores, como los requisitos estatales y federales excesivamente gravosos, la dificultad para contratar cuidadores, los déficits de reembolso de Medicaid y las nuevas barreras para prestar servicios en un entorno pandémico.
Hemos trabajado con diligencia para garantizar que los clientes y el personal afectados por el cierre de nuestro programa reciban el apoyo que necesitan. Todos los antiguos clientes y cuidadores se han trasladado a otros programas.
Aunque se cierra un capítulo importante en la historia de nuestra organización, se nos presenta una oportunidad única para cambiar nuestro enfoque y abogar por una mejor atención a las comunidades a las que servimos y un salario justo para quienes las cuidan. El sistema actual está fallando tanto a los clientes como a los cuidadores. Esto debe cambiar. Nuestro alejamiento de la prestación de este servicio directo refuerza aún más nuestro deseo de servir de catalizador para una reforma muy necesaria.
Family Eldercare se mantiene firme en su empeño de ayudar a construir una comunidad en la que las personas puedan envejecer en su lugar de forma segura, con dignidad e independencia, y en la que los trabajadores esenciales de nuestra comunidad reciban salarios justos.
Animamos a nuestras partes interesadas a que se unan a nosotros en apoyo de nuestros esfuerzos. Le invitamos a ver el vídeo para conocer mejor la historia de nuestro programa, los problemas actuales y unirse a nuestros esfuerzos por influir en el cambio.